7 de septiembre de 2008

A laS 3 eN cOmA

Llegué puntualmente como siempre. Y ahí estaban, 6 personas antes que yo, o sea, daba para rato. Todos con cara de funeral mirando al vacío atentos a cualquier movimiento, cualquier cosa ajena a la espera es motivo de atención. De pronto, el infaltable niño inquieto con un globo, lo infla y lo desinfla y a ti te duele la cabeza solo del estrés que te provoca saber que puede reventarse, pero al menos eso impide que te duermas, y ahí sigue desinflando el globo de vez en vez con ese sonido tan estridente que hace que toda la gente lo mire con dulzura, y tu no entiendes por qué la mamá no le dice algo. Estás a punto de decirle tu, hasta que ves a un lado, en la mesita, las revistas… ¡Oh, fabuloso! ésta vez sí encontrarás diversión... la abres y ahí está "Cecilia Bolocco gana el concurso Miss Universo", el rating que tuvo el "Festival de la una" ayer y reportajes novedosos como la clonación de la oveja Dolly, por supuesto, todo a la vanguardia de nuestros tiempos... pero... esperen... un segundo, esto es más interesante que lo anterior: catálogos de sofisticada decoración, para la terraza, para el ático, para la sala de estar, para la piscina, lástima que llegaron tarde, pues ya pinté mi pieza hace dos años.

Miro la hora y mi estómago me pide a gritos algo para entretenerse, cerca de ahí hay una cafetería, voy y pregunto por un mísero capri de 100 pesos : -¿Cuánto es? : -$250 : -ehh, gracias, adios.

A veces no es porque uno no tenga plata, es que por lo menos a mi me da rabia esa sinvergüenzura descarada.

En fin, te apuras porque obvio te pueden llamar y tu justo no estar ahí. Por fin, abren la puerta y… otra vez no eres tu… caes en letargo máximo con la maravillosa música que oyes de fondo que no te invita a nada más que a dormir. Miras el reloj, has estado ahí más de una hora, una vida entera, un aburrimiento extremo, piensas en por qué no te llevaste el tejido, un comics, un puzzle, un crucigrama al menos… cuando por fin, luego de hora y media abren la puerta y eres tu la elegida, algarabía extrema, tanta espera, tanto sufrimiento para que por fin te den cinco minutos de atención, mil órdenes de exámenes y un “vuelva en un mes más, pida hora con la secretaria” y para qué si jamas seré atendida a las 3 en punto.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

excelente guajajajaa

Anto! dijo...

ayyy amiga, no dejo de deleitarme con tu maravillsa redacción...eres la madre de la ortografía y la redacción de calidad.... amo todas tus publicaciones!! y esta...uuuf que quieres que te diga?? simplemente FABULOSA.... y bastante cierta, esas salas de espera me dejan en crisis, justamente nunca he entendido pq ponen esas revistas del año de la callampa y menos esa música tediosa que sólo te lleva a acomodarte ( en los incomodos asientos) y cerrar los ojos para dormir hasta que se es llamado....
En fin muy cierto todo...
saludos amigui